Independiente logró un triunfo trascendental en Avellaneda y encaminó la clasificación a octavos de final de la Copa Sudamericana. El Rojo superó 1-0 a Bahía y se trepó, en soledad, a la cima del Grupo B.
El Rojo depende de sí mismo para lograr el pase a la próxima instancia.
Independiente entró al partido con la decisión de adueñarse de la pelota y adelantarse en campo rival. En la mayor parte del primer tiempo lo logró, pero no estuvo fino en la puntada final.
Por su parte, Bahía no se interesó por la posesión del balón pero fue más profundo que el local a la hora de generar situaciones de peligro. Primero, avisó con un cabezazo de Gilberto a los 11´ y minutos después generó la chance más clara en una buena jugada que Thaciano definió por arriba del travesaño.
Desde el inicio de la segunda mitad la historia fue otra, Independiente perdió el manejo de la pelota y el visitante empezó a dominar las acciones, llegando varias veces a ocasión de gol. Aun así, con un cabezazo, Juan Manuel Insaurralde estuvo cerca de poner el primero para los de Julio César Falcioni.
A falta de 15´ para el final, el partido tuvo mayor paridad, pero gracias a una pelota parada Independiente encontró el 1-0: A los 82´, tras un centro de Alan Velasco, Thonny Anderson chocó con el arquero Friedrich y, en contra, terminó decretando la victoria del local.
De esta forma, Independiente quedó como líder del Grupo B con 11 unidades, seguido de Bahía con 8, y con una victoria o empate en la última fecha se asegurará el pase a octavos de la Copa Sudamericana.