Pese a que el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) asegura que no están autorizados los incrementos, las compañías que prestan los servicios de telefonía, internet y cable están enviando las comunicaciones.
En un comunicado emitido el 14 de abril último, el organismo público aclaró que no había «autorizado incremento de precios para mayo o junio de 2021 en servicios de telefonía fija, telefonía móvil, Internet o televisión paga».
Agregó que «oportunamente se informará cualquier aumento que se autorice» y remarcó que «cualquier comunicación en contrario surgida de las prestadoras de servicios en la cual se haya anunciado una modificación de precios carece de valor legal y no ha sido convalidada por este Ente».
Recordó que «las empresas que no hayan cumplido con las resoluciones que fijaron los incrementos autorizados y no hayan respetado el monto de los mismos o no hayan otorgado la Prestación Básica Universal consagrada por el Decreto de Necesidad y Urgencia 690/20 no podrán aplicar variaciones de precios a sus clientes».
En este contexto, las empresas justificaron la decisión de modificar los precios y salieron a anunciar aumentos para compensar el «atraso tarifario» que vienen registrando en los últimos meses.
A raíz de la pandemia, durante 2020 los cuadros tarifarios estuvieron congelados a raíz del decreto presidencial 690 que declaró servicios públicos esenciales.
El Gobierno autorizó en diciembre del año pasado aumentos del 5% en los servicios de telefonía fija, móvil, internet y tv por cable, aunque las subas llegaron al 20%.
Entre las empresas que anunciaron aumentos, Movistar lo hizo vía SMS y precisó que el ajuste será del 8% en mayo y del 7% en junio, al igual que la empresa Claro, que ya lo comunicó la semana anterior.
En tanto, Telecom aplicará un incremento del orden del 10% a todos sus productos.