La Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Fatsa), y las cámaras empresarias de la actividad acordaron en el Ministerio de Trabajo una recomposición salarial total anual para 2020 del 36,1 por ciento. Se aplicará según cada categoría del escalafón convencional del gremio, según informaron anoche a Télam las fuentes gremiales y oficiales.
A partir de abril, la categoría más alta del salario básico comenzará a percibir algo más de 75 mil pesos, la que le sigue poco más de 60 mil y, la más baja, casi 45 mil pesos.
De esta forma, el sindicato nacional y los empresarios de la actividad concluyeron la negociación salarial, que en su momento se había estancado y provocó la convocatoria a medidas de fuerza, interrumpidas por la declaración de la conciliación obligatoria.
Sindicalistas y empresarios convinieron hoy en la cartera que conduce el ministro Claudio Moroni un aumento extra al acordado de forma oportuna de entre el 14 y el 17 por ciento, según la categoría escalafonaria, lo que totalizó una mejora anual del 36,1 por ciento.
El acuerdo fue firmado por la Fatsa y todas las cámaras, que ratificaron la vigencia de los convenios 122, 103 y 108/75 y 459/06; acordaron las nuevas escalas de los básicos a partir del 1° de abril, según lo convenido en la paritaria del 25 de agosto, y consensuaron que «la diferencia entre básicos vigentes al 30 de junio y nuevas escalas y valores sobre los adicionales se considerarán una gratificación extraordinaria no remunerativa».
Esa excepcionalidad parcial regirá hasta el 30 de junio de este año, ya que desde el día siguiente tendrán carácter remunerativo, según lo convenido esta tarde en Trabajo.
La reunión fue encabezada por Moroni, y participaron el secretario de Trabajo, Marcelo Belloti, y la directora de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, Gabriela Marcelló.
Trabajo había dictado el 26 de marzo último un período hábil de conciliación obligatoria de 15 días ante el fracaso de las negociaciones y las convocatoria gremial a protestas.
El gremio realizó medidas de fuerza durante dos días a nivel nacional en el sector asistencial y, luego de esas jornadas, reivindicó «el compromiso de los trabajadores de clínicas, sanatorios, hospitales, institutos con internación, de diagnóstico y geriátricos».
El acuerdo de hoy puso fin al conflicto por una mejora salarial desatado en 2020.