Hoy se cumplen 20 años de la final de la Copa Intercontinental del año 2000 en Japón que consagró al Boca de Bianchi contra el Madrid de los Galácticos. Fue la segunda Copa de estas características para los Xeneizes, que contó con un Juan Román Riquelme descomunal.
Ese inolvidable 28 de noviembre de 2000, el día que Boca Juniors alzaba por segunda vez en su historia con la Copa Intercontinental de clubes gracias a uno de los triunfos más increíbles de su gloriosa historia, cuando venció al Real Madrid de los Galácticos por 2-1 en Tokio, con goles de Martín Palermo y una actuación asombrosa de Juan Román Riquelme.
La gesta de Tokio, en abarrotado estadio con más de 50 mil personas, enfrentó al campeón de la Copa Libertadores con el de la Champions el poderoso Real Madrid con figuras como Iker Casillas, Fernando Hierro, Raúl, el portugués Luis Figo, el brasileño Roberto Carlos y todos ellos dirigidos por Vicente Del Bosque.
Boca sorprendió de entrada, con un pase del Chelo Delgado que le permitió a Palermo superar a Casillas a los tres minutos, y luego repitió a los seis con una asistencia de Riquelme. El Real Madrid reaccionó con un tanto de Roberto Carlos pero no pudo con Boca. El Xeneize bailó al ritmo de Juan Román Riquelme que tuvo uno de sus partidos soñados y que le valió la felicitación de Maradona.