Este viernes, Paula Soto, Jefa del servicio de Hemoterapia del Justo José de Urquiza, dialogó con LT11 y La Prensa Federal sobre la primera donante de plasma en el Hospital de Concepción del Uruguay.
En primer lugar, Soto indicó que “Es una chica que se acercó y aceptó ser donante de plasma, ya que ella fue diagnosticada de Covid-19 y se recuperó. Esta donación se da, porque una vez superada la enfermedad, se puede extraer el plasma para el tratamiento de los pacientes infectados. Fue una gran experiencia y muy gratificante, ya que estamos colaborando con la Nación sobre algo que es de interés nacional. Esto es un orgullo para la ciudad”, expresó Soto.
A su vez, informó que “No se ha llegado todavía a resultados certeros sobre la efectividad del tratamiento con plasma, pero se puede observar una mejor recuperación del paciente que lo recibe, para así evitar llegar a una etapa grave de la enfermedad”, declaró.
Asimismo, Soto agregó: “Lo importante es invitar a los que se hayan recuperado de coronavirus para que se acerquen al hospital, quizás no a donar, pero al menos sacarse sus dudas sobre la donación y el procedimiento. Los mismos estudios serológicos que se llevan a cabo para la donación de sangre, se tienen en cuenta para la donación de plasma”, indicó.
En tanto, Soto aclaró que “nosotros tenemos dos protocolos de investigación que conviven juntos. Uno está destinado a pacientes en terapia que ya están graves, mientras que el otro se presenta para pacientes con sintomatología más leves, con el fin de evitar que lleguen a esa situación grave”.
Por otro lado, la Jefa del servicio de hemoterapia sostuvo que “en cada bolsa se permiten dos dosis de plasma. Entonces, por cada vez que un paciente recuperado dona plasma, nosotros podemos extraer dos dosis para dos contagiados. Todas estas donaciones de plasma quedan para nuestros pacientes en el hospital, en caso de que se lo necesite”, aclaró.
Finalmente, Soto precisó que “el donante está totalmente monitoreado por un equipo de médicos. En estos meses, no se ha observado un efecto adverso de la donación. Por ejemplo, una vez fuera del hospital, el donante puede continuar con su vida normal. De hecho, pasadas las 48 hs, esa misma persona puede volver a donar plasma justamente porque luego de la extracción de plasma, se devuelven los glóbulos rojos a la persona”, finalizó.