Pidieron acotar movimiento de ciudadanos para evitar propagación de casos a través de una frontera permeable como lo es la que divide la Ciudad de Buenos Aires con el primer cordón de la provincia.
Varios funcionarios bonarenses su sumaron este fin de semana a la polémica iniciada por intendentes del PJ cuyos distritos lindan con la Ciudad de Buenos Aires y cuestionan lo que a su criterio es una “flexibilización apresurada” de la cuarentena porteña.
Los ministros de Gobierno, Teresa García, de Desarrollo de la Comunidad, Andrés “Cuervo” Larroque, y el viceministro de Salud, Nicolás Kreplak, pidieron “ser muy cuidadosos” y que “ningún actor se corte solo” a la hora de tomar medidas de ese tipo.
La polémica iniciada por los alcaldes del Frente de Todos motivó al menos dos encuentros entre Alberto Fernández, el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta y el gobernador Axel Kicillof en pos de limar las diferencias surgidas a partir, sobre todo, de la autorización para la apertura de distintos rubros comerciales y el crecimiento de los casos positivos en los barrios vulnerables en la Ciudad.
Esas diferencias en un ámbito geográfico y cultural indivisible se expresaron también en un ejercicio de mensajes políticos, tanto hacia adentro del oficialismo entre los sectores más duros del kirchnerismo, como de la oposición con foco en aquellas voces del PRO que cuestionaron el trabajo conjunto entre el Presidente y el jefe de Gobierno porteño.
Así las cosas, en medio de los chispazos que se vienen repitiendo desde hace una semana tras la apertura de varios rubros, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, respondió que la movilidad de gente en la Ciudad “aumentó, pero no mucho más de lo que había”.
En diálogo con Rock and Pop, Larroque indicó que “es objetivamente una realidad que el foco de la pandemia está en la ciudad de Buenos Aires”, aunque matizó: “Tenemos que ser muy cuidadosos de controlar esa situación, sabiendo los riesgos que hay sobre todo en el conurbano. Tenemos que colaborar todos y no buscar culpables”.
El dirigente de La Cámpora se refirió a las quejas de varios intendentes, como Mayra Mendoza (Quilmes), Jorge Ferraresi (Avellaneda), y Fernando Gray (Esteban Echeverría), que apuntaron contra las autoridades de la Ciudad por el aumento de casos en sus distritos y pidieron a Larreta dé marcha atrás con la apertura de actividades económicas. Incluso, el intendente de Florencio Varela, Andrés Watson, aseguró que esa localidad “se está llenando de contagios provenientes de la Ciudad de Buenos Aires”.
Por su parte, García advirtió que la apertura comercial en CABA implica un “enorme riesgo para el conurbano”, al tiempo que señaló que la medida hizo que se incrementara “en 500 mil la cantidad de personas que se trasladan” de la Provincia a la Capital Federal.
Por último, el viceministro de Salud, consideró que todavía no es momento de aumentar la circulación en el AMBA y señaló que “el peor escenario epidemiológico es el traslado de la gente porque una persona que vive en un lugar donde no hay casos, va a Capital, se contagia y puede contagiar en su barrio”.
Foto Telam.