La Feria Franca que cumplió 19 años de funcionamiento ininterrumpido, retomó sus actividades ayer luego de varias semanas de Aislamiento Obligatorio. Se formaron largas colas y fue necesaria mucha paciencia para poder acceder a los productos regionales.
Tal como adelantó La Prensa Federal, este sábado volvió a funcionar con un movimiento reducido respecto a meses anteriores, la tradicional Feria Franca contándose con la presencia de una veintena de productores y emprendedores de la zona.
Se trata del primer paso luego que fuera suspendida en el medio del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
La fisonomía se presentó distinta a lo que la Feria nos tiene acostumbrado desde hace 19 años cuando se inició. El primer gran cambio fue el horario, se inició a las 9 de la mañana para evitar el frío y mejorar la organización. A ello se le sumaron los barbijos, los guantes y esencialmente, el distanciamiento social, que fueron las apreciaciones que a todos llamaba la atención. Nuevos hábitos que durante un buen tiempo se deberán considerar al concurrir a espacios como el referido.
Cabe destacar que entre los principales puntos del “Protocolo de Higiene y Seguridad” de la Feria Franca se destaca que: las personas deberán respetar el distanciamiento de 2 metros entre sí. Cada feriante debe disponer de guantes, máscara, barbijo o cubre boca, alcohol 70%, y demás elementos de limpieza para su stand. No pueden concurrir aquellas personas integrantes de los grupos de riesgo. Los feriantes deberán colocar marcas indicadoras de distancia (2,00 mts.) como así también carteles de concientización que contribuyan a mitigar la propagación del virus. Se habilitaron dos cuerpos de sanitarios, provistos de jabón líquido y toallas de papel.
Por último, se destacó que todos los feriantes coincidieron en la necesidad de aclarar que la continuidad de la Feria quedará sujeta a la responsabilidad y compromiso ciudadano respecto al cumplimiento de las disposiciones que no buscan otra cuestión que el cuidado de la salud de todos.