El gobierno de Uruguay anunció que comenzará a hacer exámenes de coronavirus a grupos aleatorios, designados con la técnica de muestreos, con el objeto de detectar más casos de la enfermedad especialmente en pacientes asintomáticos.
«Vamos generando los escenarios, como más camas de terapia intensiva, con (tests a) grupos centinelas aleatorios, generar otras estrategias, más protocolos», afirmó el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, en una entrevista publicada hoy por el diario montevideano El Observador.
El secretario de la Presidencia reconoció que «hay mucha gente a la que se le cayó la actividad, por diferentes motivos, y todo eso hace que haya que dar una atención especial y empezar por los más vulnerables».
Delgado reivindicó que el gobierno haya tomado «medidas muy duras, muy rápido», que «generaron que lo que pasa en otros países, el contagio exponencial, en Uruguay se fuera transformando en una curva más lenta, achatándose».
Uruguay es uno de los países de Sudamérica menos afectados por la pandemia, con 517 casos confirmados y nueve fallecidos, y desde hace varios días tiene más pacientes recuperados (298) que infectados activos (210, y de estos solo 14 internados, todos en terapia intensiva), según actualizó esta noche el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae).
Paralelamente, Delgado defendió que otras disposiciones, como aislamiento social o el uso de barbijos, no sean imperativas. «Estas medidas son distorsivas y por eso a veces pedimos disculpas; nos negamos a pensar que haya que instalar algo casi policíaco para que la gente se quede en la casa; en los países donde se hizo hay más personas procesadas o detenidas que infectadas», dijo.
Consultado sobre cuándo se dispondrá la reapertura de las fronteras, respondió: «La verdad es que no lo sé, pero tampoco lo saben los epidemiólogos, el presidente de la república o los ministros».