Galo Impini está por convertirse en el jugador que más vistió la camiseta de Rocamora en las 14 Temporadas Nacionales que participó el Rojo. Es un ejemplo de humildad, trabajo y sacrificio, siempre pone el Club por sobre cualquier cosa. De 1,93 mts, llegó a la Institución de Roja a los 5 años, hoy tiene 22.
“Todos los entrenadores que tuve me marcaron, ya que aprendí cosas de cada uno de ellos. Hoy en día estoy estudiando profesorado universitario de educación física, estoy muy contento con esta chance que me están dando y trato de dar lo mejor de mi en cada partido. Van pasando temporadas y siempre hay algo que mejorar, cuando termine esta trabajaré en todos los detalles que pueda.” – manifestó Galo Impini.
Una característica de Galo es que siempre se mantuvo en el Club, no necesitó emigrar para crecer o ser protagonista, un ejemplo de humildad y de nunca bajar los brazos, habla de su Club de toda la vida: “Rocamora para mi significa muchas cosas, pero por sobre todo es mi segunda casa, donde pasé parte de mi niñez y adolescencia. Tengo grandes recuerdos jugando en el playón, jugando a escondidas de noche.
Es el lugar que me ayudó a formarme como persona y jugador además de lo que aprendía en mi casa. Encontré amigos, muy buenas personas y los siento como mi familia. Son muchas cosas que viví dentro del Club, algunas buenas y otras no tanto, pero son mi familia y eso significa mucho para mi”
También habló su Coach Juan Varas, quién lo conoce muy bien desde chico. Nunca pudieron coincidir como entrenador y dirigido hasta que Galo llegó a U19. Anteriormente Juan había estado como asistente en U15, U17 y en TNA junto a Cristian Santander, y hoy nos cuenta lo que significa Galo para la Institución Roja:
“Galo es un ejemplo para todo el Club, no necesitó irse a ningún lado para demostrar que podía ser un jugador del segundo nivel del básquet argentino, no necesitó jugar ninguna selección de Entre Ríos para trabajar con humildad y sacrificio en la búsqueda de encontrar su mejor lugar.
Galo crece todos los días, transforma su personalidad con hábitos de un jugador profesional.
Claramente tienes sus virtudes dentro de la cancha de índole defensivo, está mejorando su tiro de tres puntos con una gran capacidad rebotera y sobre todas las cosas es muy ubicado a los pedidos del entrenador. Está dispuesto a dar todo lo que esté a su alcance para el beneficio del equipo sin importar que eso no se vea reflejado en estadísticas personales… cuando digo que Galo es un ejemplo me refiero a que lo es en varios sentidos, desde cómo se construyó desde inferiores dentro del club pasando por todas la categorías, como fue desarrollándose su juego, de cómo está trabajando para convertirse en un alero ( ya que anteriormente fue un ala pívot). Dentro de ese desarrollo está también su personalidad y su ambición de querer más, y que hoy por suerte lo ponen como el alero titular del equipo”.
El Coach nos habla también de su particular apodo hacia Galo: “Es por una cuestión de afecto y cariño que repercute muy bien en el grupo y a él también. Muchas de la conversaciones que tenemos con Galo son sobre cómo poder trasladar muchas de las cosas que él aprendió en su categorías intermedias en donde él era determinante y llevarlas al equipo profesional. El es un “Pichón” que debe abrir las alas, volar y animarse, ya lo adoptaron (al apodo) los dos o tres planteles que han pasado y estimo que seguirá siendo así hasta que le crezca la barba… que no es más que una muestra de afecto y cariño entre el y yo”.