Mondragón comentó que el conflicto inició por una solicitud similar a la que se estaba dando en simultaneo en Coronda, Unidad Penal de Santa Fe. Los internos solicitaban mayor higiene ante el COVID-19 y mejor calidad de vida ante la falta de suministros que entregaban sus familiares en las visitas que actualmente están suspendidas.
El conflicto se inició dentro del pabellón 1, donde hay 90 internos, los hombres se manifestaron violentamente, prendiendo fuego al menos 10 colchones en las puertas de ingreso. A partir de ese momento comenzaron a romper paredes y lograron unir tres pabellones, haciendo una redada generalizada de 120 personas. Seguidamente, se dirigieron al patio, donde comenzaron a agredir al personal con pierdas.
El director de la Unidad Penal destacó “Nosotros en ese momento contabamos con una guardia de doce personas, es por esto que necesitamos la ayuda de las demás fuerzas. Llamé al Jefe Departamental de la Policía de Entre Ríos y le pedí apoyo, luego llegaron Gendarmería Nacional, Policía Federal y Prefectura Naval”.
“En principio ingresó un grupo especial de Gendarmería y Policía de Entre Ríos, damos fe de que fueron muy respetuosos con nuestro lugar y directivas, entendieron que somos nosotros quienes conocemos el lugar y las formas. Participaron hasta que pudimos retomar el diálogo con los internos” comentó Mondragón.
Además, el director comentó que se hicieron presentes en el lugar el Juez Federal, Pablo Seró, los fiscales Lombardi y Giles y el delegado penitenciario Federico Tanga. Más tarde llegaron desde Paraná el Director General y Jefe de Cuerpo de las Unidades Penitenciarias. Por otro lado, trabajó en el lugar personal de Bomberos Voluntarios y periodistas de la ciudad quienes pusieron a disposicion drones para controlar la situación desde el aire. Además vecinos se acercaron y brindaron solidariamente agua a el personal que trabajaba en el lugar.
Las razones
Mondragón destacó que la gravedad de la situación se dio por el contexto de pandemia que estamos viviendo. Las razones, son similares a las de la Unidad Penal Coronda de Santa Fé. “Con la cuarentena, los internos no tienen visitas de sus familiares, esto produjo el inicio de una serie de reclamos” expresó.
En la mañana previa a la redada, el jefe de la Unidad Penal Nº4 destacó que habían mantenido un diálogo con los internos “Les explicamos la situación, pero ellos recibían a sus familiares que siempre les traían cosas. Con la cuarentena, nadie puede venir y actualmente no reciben nada ni a nadie. Nosotros no podemos estar a la altura de sus demandas, no estamos a la altura de las circunstancias económicamente”.
“Los familiares pueden venir a dejar las cosas, pero no tenemos la autoridad de justificar que estén en la calle. Si el familiar llega hasta la puerta de la unidad y trae cosas nosotros se las recibimos, pero no podemos justificar su presencia en la calle y pueden ser notificados por las fuerzas por incumplir la cuarentena”.
En cuanto a la búsqueda de una solución señaló “Hemos buscado todas las posibilidades, pensamos en poner un vehículo a disposición para que puedan buscar sus cosas, pero hubo un grupo que no estuvo de acuerdo e inició el problema”.
Los daños
Según explicaron desde la Unidad Penal, se quemaron al menos diez colchones, se generaron daños en la instalación eléctrica del establecimiento y los pabellones sufrieron daños generalizados en sus paredes. Pero desde el final de la redada hasta ayer a la mañana, se trabajó en la puesta a punto y actualmente estaría funcionando con normalidad. Además se habrían perdido pertenencias de internos, tales como mesas y bancos. Actualmente se estaría trabajando en la limpieza del lugar.
La solución
Finalmente el director destacó que hablando con los internos se llegó a un acuerdo para finalizar el episodio en paz con la firma de un acta. La misma daba garantías a los internos de que no se reprimiría ni trasladaría a ninguno. Cabe destacar que a pesar de los incidentes, ningún interno ni personal del lugar fue hospitalizado. Únicamente se registraron lesiones por los disparos de goma que se ejecutaron para disuadir la situación. Actualmente los internos están viviendo su día normalmente.