La Cámara de Casación Penal de Paraná denegó el recurso extraordinario a la defensa de Néstor Pavón, quien deberá enfrentar un nuevo juicio, pero se lo otorgó a la de Sebastián Wagner. A mediados de junio, la Cámara de Casación Penal de Paraná dio otro de sus polémicos batacazos: anuló parcialmente la sentencia del femicidio de Micaela García, al considerar que se debe juzgar nuevamente a Néstor Pavón por su posible participación en el abuso y el asesinato de la víctima, en vez del encubrimiento del violador serial Sebastián Wagner, como se lo había condenado. Respecto a Wagner, confirmó su condena a prisión perpetua.
En los últimos días acaba de resolver sobre los recursos extraordinarios presentados por las defensas de los dos imputados. Es decir, el pedido de cada abogado para que les permitan llevar su reclamo ante la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia. La respuesta de los jueces Hugo Perotti, Marcela Badano y Marcela Davite fue conceder dicho recurso a Wagner, pero denegárselo a Pavón, quien ahora solo puede ir en queja a tal instancia para buscar un último intento de evitar un nuevo juicio.
Tal como se ha informado, Pavón fue absuelto del femicidio de Micaela por el Tribunal de Juicio de Gualeguay por la absoluta falta de pruebas de su participación en el hecho, sin embargo Casación sostuvo que analizó mal las evidencias y mandó a hacer un nuevo debate. El defensor de Pavón, Ramón Horacio Barreto, en su pedido de llegar al STJ, sostuvo que la sentencia de Casación «no da razones que demuestren la existencia de la arbitrariedad del fallo que anulara, que solo ha cuestionado la valoración probatoria sin decir de qué forma la distinta valoración que realiza puede llevar a la certeza que necesita toda sentencia condenatoria», e insistió en que «no existe prueba alguna que acredite la coautoría de Pavón en el femicidio y abuso sexual investigados, destacando en tal sentido que los testimonios en que se basa la sentencia de Casación carecen de todo valor probatorio para fundar una sentencia condenatoria». En la última resolución, el Tribunal de Casación respondió:
«Constatamos en primer lugar que la decisión cuestionada no reviste el carácter de resolución definitiva, entendiendo por tal, aquella que pone término al debate definiendo la cuestión, impide continuar la discusión o causa un agravio de imposible o insuficiente reparación ulterior». Además, los jueces plantearon que «el tribunal de Casación se encuentra habilitado, conforme la nueva concepción del recurso, a una revisión integral del fallo atacado que permite cuestionar la fijación de los hechos, el encuadre legal o las penas impuestas, sin que la falta de inmediación pueda ser argüida como impedimento del control». Por esto, denegó el recurso extraordinario a Pavón.
De esta manera, Casación evitó que, en el futuro, el máximo tribunal de la provincia (STJ) revirtiera una de sus decisiones, como ha sucedido en varias causas (como en la del femicidio de Gisela López). Son públicas las profundas diferencias que se han planteado entre los vocales de la Sala Penal el Superior Tribunal y los jueces de Casación, quienes han tenido posiciones primordialmente favorables a las posturas del Ministerio Público Fiscal. Los resultados están en sus fallos contrapuestos.
En este marco, el abogado Barreto renunció a la defensa de Pavón. El letrado explicó a UNO esta decisión y lamentó el accionar judicial respecto al acusado: «Mi renuncia fue porque no pueden solventar los gastos del proceso ya que Pavón es el único proveedor de su familia. De mi parte como letrado auxiliar de la Justicia siento mucha tristeza respecto a la búsqueda de justicia del Ministerio Público Fiscal, de ensañarse con un inocente privado de su libertad a la espera de un juicio con fecha incierta y buscan otro culpable a cualquier precio.
No quiero dejar de emitir mi opinión respecto a la Cámara de Casación, con todo el respeto que se merecen los señores jueces, pero dictar resoluciones omitiendo el principio de inmediación procesal y valorando las pruebas es muy peligroso para el derecho, ya que está en juego lo más preciado de un ser humano:
la libertad. Néstor Pavón debe estar en libertad o al menos esperar el nuevo juicio libre, ya que en primera instancia fue absuelto por unanimidad por el Tribunal de Gualeguay, del femicidio, y la única condena por la que está preso desde el 6 de abril del 2017 es Encubrimiento agravado. La Cámara de Casación la declaró nula. La pregunta es ¿por qué sigue detenido? Y la respuesta es: porque presumen que es culpable».