En lo que va de la jornada Argentina consiguió cuatro medallas de plata y una de bronce. Los deportes acuáticos fueron proveedores de las preseas, que podrían ser más con la caída de la noche.
El deporte argentino en Lima, Perú, sumó nuevas medallas en el marco de los XVIII Juegos Panamericanos. El agua trajo la mayoría de las preseas del domingo entre las que se cuentan cuatro de plata y una de bronce. La primera llegó temprano en la disputa de la carrera de aguas abiertas, con el segundo lugar de Cecilia Biagioli, que logró meterse en el podio de la carrera de 10 kilómetros, por detrás de Ana De Jesus Soares. El registro de la argentina fue de 2 horas, 1 minuto, 23 segundos y 2 décimas. Romina Imwinkelied, por su parte, terminó cuarta. Pero el grueso de las medallas llegó en canotaje slalom. El deporte sobre canoas trajo muchas buenas noticias para la Argentina, que acumuló tres preseas de plata. La primera fue de Sebastián Rossi, que quedó detrás del estadounidense Zachary Lokken en la categoría C1 masculino. También hubo plata para Nadia Riquelme, que había quedado tercera en la categoría K1 femenino, pero la descalificación de la brasileña Omira Estacia la benefició para subir al segundo puesto. Quedó detrás de la estadounidense Evy Leibfarth. La otra plateada fue de Lucas Rossi, que con un tiempo de 1 minuto, 26 segundos y 23/1000 quedó por detrás del brasileño Pedro Goncalves (1’25”81/1000) en la categoría K1 masculino. La única medalla de bronce en lo que va de la jornada, más allá de la asegurada en tenis masculino (debe definirse entre Facundo Bagnis y Guido Andreozzi) llegó en el Open Surf, de la mano de Ornella Pellizzari. La marplatense perdió el mano a mano hacia la final ante Dominic Barona con un puntaje de 12,17 en sus dos mejores olas. El día tiene aseguradas tres medallas más para los argentinos, que tienen las finales de tenis femenino (Nadia Podoroska vs. Caroline Dolehide), básquet (ante Puerto Rico) y vóley (ante Cuba) masculinos.