El apellido Bullrich sigue siendo noticia en la faz judicial y policial. A lo ocurrido en los últimos días con un episodio vinculado con la adulteración de un video de la ministra de Seguridad de la Nación, se suma ahora el desbaratamiento de una pequeña organización que vendía autos. Una mujer se hacía pasar como sobrina y abogada de la funcionaria de Mauricio Macri, y junto a un policía retirado realizaban defraudaciones millonarias con la supuesta entrega de vehículos que se encontraba incautados por la Justicia. Fue así que el sábado la Policía de Entre Ríos logró secuestrar dinero, armas, computadoras, celulares y otros elementos vinculados con los sospechosos. Personal de la División Delitos Económicos realizó un allanamiento en Paraná, más precisamente en calle José María Domínguez al 2400, donde vive un policía retirado de 55 años, oriundo de La Paz. En la vivienda no había nadie, pero con los recaudos legales suficientes los investigadores pudieron incautar material que compromete al uniformado jubilado hace un par de años y a su pareja, la supuestamente parienta de la ministra Patricia Bullrich. En la vivienda se encontraron dos armas de fuego, una computadora, pendrives, 25.000 pesos en efectivo, dólares, euros, documentación, celulares, proyectiles. La investigación se inició en Concordia, el año pasado. Allí un par de víctimas denunciaron que una abogada que decía ser familiar directa de la ministra de Seguridad de la Nación, les ofreció para la venta vehículos que iban a ser rematados y que se encontraban en poder de la Justicia y de la fuerzas de seguridad. Al principio debían pagar una suma de dinero en concepto de transferencia y esperar unas pocas horas para recibir la documentación junto al vehículo. El problema es que nunca aparecieron los rodados. La causa chocó con el inconveniente en que los sospechosos no fueron encontrados en Concordia. Lo cierto es que decidieron afincarse en Paraná, en el barrio San Agustín. Casualmente la misma modalidad fraudulenta fue denunciada en Paraná y tras cruzar información la Justicia y la Policía de Paraná, lo mismo ocurrió en Buenos Aires. De la pesquisa se obtuvieron llamativas similitudes en el accionar delictivo. En la causa, al menos de Paraná, se supo que hubo tres víctimas que llegaron a pagar cerca de un millón de pesos para asegurar la operación de compra de los vehículos que eran ofrecidos a un valor mucho menor al del mercado. Por el momento, el policía retirado no pudo ser localizado y detenido, como tampoco su pareja que podría contar con el DNI donde figura el apellido Bullrich. Se sospecha de que el nombre real es otro.