El dato surge de un informe de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, a través de su sistema de información (Siber), en el cual se destaca que en los últimos tres años el cultivo logró un crecimiento gradual y en esta campaña se consiguió un incremento interanual del 21% (56.600 hectáreas más). “El rendimiento promedio provincial del maíz de primera es el máximo de los últimos seis años, con un incremento interanual del 67% (3.208 kilos más por hectárea). El rinde medio fue de 8.007 kilos por hectárea, lo que permitió una producción de 2.360.600 toneladas; es decir un 103% más en comparación con la campaña pasada, que sufrió el impacto de la sequía”, precisa el informe. Los técnicos de la entidad señalan que el área no cosechada fue del 9% y se destinó al consumo animal, ya sea como silo de planta entera o grano húmedo. Se logró cubrir el consumo anual teórico de maíz, que es empleado como insumo por parte de la actividad ganadera, porcina y avícola. La provincia tiene un consumo de alrededor de 1.800.000 toneladas por año y alrededor del 85% es requerido por la avicultura. A nivel de lote se registraron rendimientos de maíz de 5.000 hasta 13.000 kilos por hectárea. Los rendimientos mínimos se asocian a lotes afectados por las heladas tardías en octubre. Para los especialistas de la Bolsa entrerriana, el clima fue uno de los factores más importantes en la campaña histórica que logró el cereal, porque acompañó con una muy buena oferta hídrica el desarrollo de las plantas. El departamento con mayor producción fue Gualeguaychú, con una participación del 14% de las toneladas totales. En segundo y tercer lugar se ubicaron Uruguay y Victoria, con un aporte del 12 y 11 %, respectivamente.