Javier Vilar (37) era de Gualeguaychú y había elegido la carrera de suboficial en el Ejército por vocación. Pero se vio obligado a trabajar como custodio privado para completar su sueldo. Fue en ese contexto que motochorros lo mataron en un robo cuando transportaba una importante suma de dinero.
El asalto ocurrió este viernes en Beiró y Cervantes, en el barrio porteño de Villa Devoto, cuando Vilar y Gustavo Ismael Morales (42), otro militar que hacía de custodio, se bajaron de un auto con dos mochilas con dinero cada uno. Las habían ido a retirar a una oficina sobre la avenida Córdoba y las llevaban a una financiera ubicada en Beiró al 5100, según informaron fuentes policiales
Apenas hicieron unos pasos cuando dos ladrones armados los sorprendieron. Uno le exigió el bolso a Morales y se lo entregó. El otro asaltante forcejeó con Vilar y le dio un tiro. Cuando el oficial cayó, le sacaron la mochila.
Javier estaba casado y tenía tres hijos de 3, 5 y 14 años. Hace poco uno de los chicos tuvo un problema en su vista y tuvo que pedir ser trasladado desde Campos de los Andes, en Mendoza, a Buenos Aires para que lo puedan operar. Su último destino era en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.