Con sufrimiento, Argentina logró un triunfazo 23-19 y se afianzaron en el tercer lugar del Rugby Championship. Por primera vez, consiguió dos triunfos en el torneo del hemisferio sur. Gran tarea de los entrerrianos Kremer y Ortega Desio. Merecido desde todo punto de vista. Por el trabajo y el esfuerzo de un grupo dispuesto a reescribir, una y otra vez, los libros de historia. De eso están hechos estos Pumas que pegaron en los momentos claves, soportaron pasajes de adversidad y se quedaron con un triunfo de oro. De ida y vuelta. Así se dio el inicio de las acciones en Gold Coast, donde cada equipo, apelando a sus fortalezas, intentó marcar el ritmo de las acciones y someter a su adversario. Emiliano Boffelli, con un penalazo desde atrás de mitad de cancha, abrió la cuenta para los argentinos para dejar las cosas 3-0 en cinco minutos del primer tiempo. Utilizando el ancho de la cancha y moviendo la pelota de un lado al otro, Will Genia respondió para el dueño de casa, pero Nico Sánchez -atravesando un sensacional momento individual-, respondió por la misma vía para mantener la distancia en el tanteador. El poder de desequilibrio de un elusivo Israel Folau le permitió a los australianos pasar al frente con su conquista pegado a la bandera, aunque Delguy trasladó a la chapa el buen trabajo de sus compañeros tras una contra iniciada por Pablo Matera y decreto el 17-14 con el que se extinguió la primera mitad. Envalentonados con el envión que le otorgó el cierre del primer parcial, Boffelli llegó a la zona roja, pero la acción se invalidó por una pase forward de Delguy en la acción previa. Sin embargo, Sanchéz sumó con un penal y sacó seis puntos de ventaja para Los Pumas. Urgido por la necesidad, Michael Cheika movió el banco y tuvo su premio con una gran maniobra de los backs que coronó Dane Haylett-Petty para reducir la brecha a sólo un punto. A partir de ahí los pateadores tuvieron sus oportunidades de sumar de uno y otro lado, pero ambos fallaron y la chapa se mantuvo en 20-19 a diez minutos del final. El significativo aporte de Montoya y Alemanno desde el banco y la encomiable producción defensiva -inmolándose en cada situación de contacto-, le dieron a Boffelli la chance de bajar la persiana al partido con otro penalazo que decretó el triunfo nacional tras 35 años en suelo Aussie.
La actuación de los entrerrianos: Marcos Kremer: asistencia poco ortodoxa pero igual de efectiva para que el pibe de Burzaco hiciera de las suyas. Durísimo de bajar ya sea cuando pasó al ataque o cuando hubo que soportar embates. Muy utilizado en el line (capturó cuatro). Javier Ortega Desio: loables esfuerzos para neutralizar tanto a Genia como a Folau en sendos tries, absorbió la presión del scrum y buscó no complicarse liberando rápido el balón. Amor propio para ponerse de pie en situaciones adversas y seguir tackleando. Australia (19): Dane Haylett-Petty; Israel Folau, Reece Hodge, Matt Toomua y Marika Koroibete; Kurtley Beale y Will Genia; Pete Samu, David Pocock (cap) y Lukhan Tui; Izack Rodda y Rory Arnold; Allan Alaalatoa, Tatafu Polota-Nau y Scott Sio. Ingresaron: Folau Faingaa, Sekope Kepu, Taniela Tupou, Adam Coleman, Lukhan Tui, Nick Phipps, Bernard Foley y Jack Maddocks. Argentina (23): Emiliano Boffelli; Bautista Delguy, Matías Moroni, Jerónimo de la Fuente y Ramiro Moyano; Nicolás Sánchez y Gonzalo Bertranou; Javier Ortega Desio, Marcos Kremer y Pablo Matera; Tomás Lavanini y Guido Petti; Santiago Medrano, Agustín Creevy (cap) y Nahuel Tetaz Chaparro. Ingresaron: Julián Montoya, Santiago García Botta, Juan Pablo Zeiss, Matías Alemanno, Juan Manuel Leguizamón, Martín Landajo, Bautista Ezcurra y Juan Cruz Mallía. Entrenador: Mario Ledesma