Terminaron casi cuatro años de espera, 1.432 días después de que Mario Goetze marcara el gol que bordó la cuarta estrella en la camiseta de Alemania, Rusia y Arabia Saudí saltarán al terreno de juego para inaugurar otro capítulo de la historia de la Copa Mundial de la FIFA.
La ceremonia inaugural tendrá un formato un poco diferente en comparación con ediciones anteriores, ya que esta vez se concentrará en las actuaciones musicales y se llevará a cabo muy cerca del saque inicial: apenas media hora antes del comienzo del partido, que está programado para las 12:00 (hora de Argentina).
Ninguno de los dos rivales llega a este encuentro en un buen momento de forma. Rusia no ha conocido la victoria en los siete últimos partidos no oficiales que ha disputado desde que se impuso a la República de Corea en octubre. Por su parte, los saudíes han perdido tres amistosos seguidos, aunque, en su descargo, se han visto las caras con tres rivales de peso: Italia, Perú y Alemania, la defensora del título.
Ambos confiarán en llevarse una victoria del Luzhniki para poner fin a la racha estéril que llevan registrada en las fases finales mundialistas: Rusia no ha ganado ni un solo partido en un Mundial desde 2002, y el último triunfo de Arabia Saudí en una fase final se produjo en Estados Unidos 1994.
El futbolista Ronaldo, bicampeón del mundo con Brasil, y los cantantes Robbie Williams y Garifullina animarán apertura de la Copa del Mundo antes del encuentro entre Rusia y Arabia Saudita.