La iniciativa fue presentada en el Municipio de Luján por el flamante Instituto BioGesta, que es presidido por la contadora Estela Miño, oriunda de Concepción del Uruguay. El contenido de la iniciativa será presentado en nuestra ciudad en el marco de la Expo Concepción 2018. “Cambia por completo el paradigma que tenemos sobre la basura, espero en un futuro poder desarrollarlo en Entre Ríos”, dijo la exdirectora de la regional Gualeguaychú de la Universidad de Concepción del Uruguay.
La cantidad de basura generada y el destino de la misma es un problema con el que lidia Gualeguaychú hace muchos años, como ocurre en todas las ciudades medianas y grandes del territorio provincial. “El mundo avanza en diferentes iniciativas que tienden a la recuperación y transformación de los millones de kilos de desechos domiciliarios, industriales y de todo tipo, generados a diario”, publicó El Día.
Justamente para presentar un ambicioso proyecto que busca generar un círculo virtuoso entre la basura y las necesidades de la comunidad, es que el jueves pasado la contadora Estela Miño, quien preside el Instituto BioGesta, llegó a la localidad bonaerense de Luján para ser recibida por las autoridades municipales.
La propuesta, que ya fue seleccionada y aprobada, modifica el paradigma de la basura, para transformarla en alimentos, energía y biofertilizantes. Sobre la iniciativa, que promete generar 200 nuevos puestos de trabajo en los primeros dos años, la contadora Miño dialogó con ElDía. “Se trata de un parque simbiótico, un proyecto de biorremediación integral que cuenta con cuatro plantas: Separación de la basura domiciliaria y reciclaje del material inorgánico; creación de biofertilizantes, generación de energía (GNC y eléctrica) y cultivo de espirulina, un alga con importantes propiedades alimenticias”, enumeró.
“Como la gran mayoría de las ciudades del país, Luján tiene un grave problema con la cuestión de la basura a cielo abierto. Por eso presentamos el proyecto del Parque Simbiótico, que transforma los desechos en materia prima” y “recupera el 95% de los desechos orgánicos e inorgánicos, el resto –patogénicos y áridos, entre otros– conforma el único porcentaje que no es reutilizado”, describió la profesional luego de la reunión mantenida con el secretario de Producción de Luján, Miguel Paulón, concejales y representantes de Oil Fox Argentina, empresa que junto a Cat Ambiental financiará la iniciativa.
Entre los puntos más destacados y novedosos del proyecto, Miño destacó la creación de biofertilisante y energía con los desechos orgánicos. “Según el cálculo que se hizo para Luján, la energía que se generaría allí les alcanzaría para alimentar la totalidad de la red pública urbana”, remarcó.
Asimismo, “con una parte muy pequeña de todos esos biofertilizantes se hace la espirulina, que se utiliza en suplementos alimentarios en comprimidos, sopas, leche chocolatada, barras de cereal y pastas, entre otras cosas”, agregó la profesional. Al tiempo que remarcó el “altísimo nivel de comercialización” de estos productos, lo que “se transforma, por un lado, en una solución del tema basura y, por otro, en una fuente de ingresos para el propio Municipio”.
La inversión para este proyecto, que es privada, se estima en 20 millones de pesos. Mientras que la recuperación de la misma se calcula en siete años aproximadamente. “Después, el Estado pasa a percibir el grueso de los ingresos generados. Es un círculo virtuoso que viene a cambiar por completo el paradigma que tenemos de la basura”, completó Miño.