Hace 16 días que el cabo de la Policía de Entre Ríos, Martín López, pelea por su vida. La noche del 8 de febrero fue baleado por cazadores furtivos en un campo de la localidad de Santa Elena. Desde entonces, está internado en la Unidad de Terapia Intensiva del hospital San Martín, con pronóstico reservado. Pero en los últimos días, su situación se agravó, ya que se han registrado momentos de fiebre.
Guillermo Grieve, jefe del servicio de Terapia Intensiva del San Martín, informó el actual parte médico del paciente. «Está grave. Sigue en Terapia, con respirador artificial, en pronóstico muy reservado. Está con fiebre, con el abdomen muy distendido, así que voy a pedir al Servicio de Cirugía una laparotomía».
Se trata de una cirugía que se hace con el propósito de abrir, explorar y examinar para tratar los problemas que se presenten en el abdomen.
«El resto está estable, mejoró la insuficiencia renal, también está estable la parte respiratoria, pero es probable que todavía tenga focos infecciosos abdominales», concluyó Grieve.
En el marco de la causa que investiga el delito de tentativa de homicidio, la Fiscalía dispuso una serie de medidas y la Policía logró dar con los principales sospechosos, así como reunir algunas pruebas. El juez de Garantías de La Paz dispuso 20 días de prisión preventiva para cuatro jóvenes, de entre 22 y 24 años, que permanecen detenidos en la Jefatura Departamental. En tanto, hay un adolescente de 17 que fue entregado a sus padres pero quedó supeditado a la causa.