Con goles de Alejandro Donatti y Hernán Encina, el Canalla se impuso 2-1 ante su eterno rival, al que no enfrentaba desde hacía casi cuatro años. Fotos. La emoción de Miguel Angel Russo.
Rosario Central celebró en el retorno del clásico del fútbol de la ciudad, ausente desde hacía tres años, al vencer 2-1 a Newell’s, aún puntero del torneo Inicial.
El Gigante de Arroyito tuvo fiesta solo con los hinchas locales, habida cuenta de la normativa de seguridad que impide la presencia de público visitante. Un fuerte operativo de seguridad, con más de mil efectivos pero con otro tanto de agentes de reserva, fue afectado para un clásico plagado de tensiones.
En la cancha hubo un primer tiempo atractivo y cambiante con tres goles en menos de media hora, y que terminó con victoria parcial y luego final de Central pese a haber sido quien menos atacó.
Sin embargo, hubo mérito del local para aprovechar las dos oportunidades que tuvo y marcar en ellas, una con un cabezazo de Alejandro Donatti y la otra por la presencia en el lugar exacto de Hernán Encina, en el balance, la figura del partido porque las hizo todas: fue salida, autor del gol principal, y también enmarañó el pleito en el segundo tiempo.
Newell’s tuvo un muy buen primer tiempo, con cuatro llegadas pero un solo gol, el de Maxi Rodríguez. Encima el árbitro Mauro Vigliano obvió un penal a favor del visitante por un empellón de Paulo Ferrari a Milton Casco.
Central se puso rápido en ventaja, a los 11 minutos cuando Pablo Pérez hizo una falta a Diego Lagos un par de metros afuera del vértice izquierdo del área grande. Delgado ejecutó al medio del área, peinó Lagos y Donatti cabeceó frontal hacia abajo.
El estallido en el Gigante se apagó cuatro minutos después cuando un pase profundo perfecto de Víctor Figueroa dejó habilitado a Maxi Rodríguez, que la bajó con calidad y definió a un costado de Mauricio Caranta, pegó en el palo y empujó al fondo del arco.
Tras el gol asomó el mejor momento de Newell’s con algunas jugadas de alto vuelo, una definición de Fabián Muñoz entre tres defensores de Central mandó la pelota bombeada que pasó muy cerca de un ángulo, luego un pared de Maxi con Casco, desborde, centro atrás y Muñoz que falló en la definición.
Cuando peor la pasaba Central, Nahuel Guzmán falló al sacar con el pie, la dejó corta en los pies de Antonio Medina, quien avanzó por el medio, metió la pelota dentro del área, Luna cayó apareado por Víctor López pero llegó a tocarla con la cabeza, descolocando a la defensa y dejándole servida a Encina para el 2-1.
Le quedó otra a Newell’s sobre el final de la etapa cuando Figueroa, de gran tarea en el primer tiempo avanzó sin marca, disparó con izquierda a colocar y Caranta que manoteó por lo cual la pelota pegó en el palo y salió al corner.
En el segundo Central fue inteligente al cerrarse y esperar y Newell’s sorprendió por dejar de ser el equipo que sabe ser. Figueroa se apagó y Maxi tampoco fue el mismo de la etapa inicial y no basó con el fuego interior de Pablo Pérez.
Entonces, desde atrás empezaron a lanzar pelotazos al frente, algo impropio del Newell’s de estos tiempos y Central empezó a ver que se le podía dar el clásico que soñó durante su estadía de tres años en el Nacional B.
Hubo una mano de Franco Peppino en el borde del área, de dudosa intención, que Vigliano tampoco consideró y un cabezazo de Pablo Pérez que sobre el final se fue sobre el travesaño, en la despedida de las chances de Newell’s.
Fuente: DyN