El entrenador de Boca no se quedó conforme con la actuación de los árbitros e ingresó muy enojado a la zona de vestuarios. 
Boca derrotó como visitante 2-1 a Cerro Porteño en Paraguay y se trajo un buen resultado de cara a la revancha de los octavos de final de la Copa Libertadores. Sin embargo, Guillermo Barros Schelotto se fue muy enojado con la terna arbitral mexicana, sobretodo con el árbitro principal, Francisco Chacón.
Al término del partido en el Defensores del Chaco, el Mellizo ingresó a zona de vestuarios muy enojado e insultando a los árbitros. En la puerta estaba el dirigente de Boca Juan Carlos Crespi, quien escuchó los reclamos de Guillermo.
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