Timo Baumgartl se equivocó y su error derivó en el tercer gol del Borussia Dortmund, que terminó quedándose con los tres puntos. Mira cómo sus simpatizantes intentaron sacarle la amargura que tenía.
En el último tiempo las escenas de violencia ya no llaman la atención, y no sólo en Argentina. Quizás no con tanta frecuencia, pero también se ven en cualquier otro lugar del mundo.
Pero a lo que no estamos acostumbrados es a que los hinchas consuelen a sus propios jugadores, y menos después de una equivocación que significó una derrota. Y mucho menos, si ese equipo va último en la liga.
Pero siempre hay excepciones. Y en este caso ocurrió en Alemania. Timo Baumgartl, de apenas 18 años, intentó darle un pase a su arquero pero el balón quedó corto y Marco Reus aprovechó el regalo para convertir el 3-1 a favor de Borussia Dortmund. El Stuttgart logró el descuento pero no fue suficiente para evitar una nueva derrota.
Al finalizar el partido, el juvenil se sentía tan culpable que estaba al borde las lágrimas. Increíblemente, sus hinchas no sólo no lo insultaron, sino que lo abrazaron y le dieron palabras de aliento.