El utilero confirmó que el enganche lo echó del vestuario contra Ferro y ventiló intimidades del plantel. “Si él sigue, Gorosito se va”, aseguró.
Miguel Galíndez Di Lorenzo, utilero del cuerpo técnico de Néstor Gorosito en Argentinos Juniors, contó un duro cruce que tuvo con Juan Román Riquelme hace unas semanas, en la cancha de Ferro Carril Oeste, cuando el Diez lo echó del vestuario.
“Tuve una discusión con Riquelme en el partido con Ferro, cuando me dijo ‘acá mando yo’ y me echó del vestuario”, detalló el utilero en radio La Red. “Pero mandaba él. Al otro día se quiso disculpar –agregó-, pero se equivocó de teléfono, porque jamás me habló. No quiero saber más nada de Riquelme. A mí me la hacen una vez y aunque te pongas de rodillas, se terminó”.
Como lo hiciera el paraguayo Julio César Cáceres, Galíndez expuso rasgos de la intimidad de Riquelme dentro de un vestuario, un tema tabú en el mundo del fútbol. “La verdad, no sabía que Riquelme era tan malo. No le daba pelota ni a (Luis) Segura y se creía el dueño del club. No lo conocía y tuve muy poco trato con él, porque es de poco hablar y mandar. Tiene sus amistades que lo siguen y nada más”, agregó el hombre que se convirtió en un talismán para Carlos Bilardo en México ’86 y acompañó al Coco Basile en las Copas América del 91 y 93.
“A Riquelme todos le tienen miedo y no le dicen nada. No entrenaba nunca, corría un ratito y encima le tenían que dar la pelota al pie“, disparó el utilero más conocido del fútbol argentino.
Sobre su futuro en el Bicho de La Paternal, Galíndez no sabe si volverá pero vaticinó que “si Riquelme sigue, Gorosito se va. Yo a Pipo y a ‘Cacho’ Borrelli (ayudante del DT), les debo la vida. Así que con ellos voy a volver a hablar, son mis hermanos. Pero con Riquelme no hablo más”.