La docente Mariela Leiva, cara visible de la campaña Paren de fumigar las escuelas y denunciante en una causa que este jueves podría elevarse a juicio, recibió una llamada telefónica de un número desconocido con tono amenazante, expresándole que abandone su activismo en defensa de la salud y el ambiente. “Dejá de joder y quedate en tu casa porque sino la vas a pasar mal”, contó que le advirtieron.
El 7 de diciembre de 2014 una fumigación aérea causó vómitos, enrojecimiento de ojos, dolor de estómago y de cabeza a los alumnos de la escuela 44, República Argentina, de Santa Anita (departamento Uruguay).[sociallocker][/sociallocker] Su directora, la docente Mariela Leiva, militante de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), realizó una denuncia y desde ese momento inició una dura batalla contra la naturalizada práctica de pulverizar agroquímicos de alta toxicidad sin medir consecuencias ni en el medioambiente y en la salud de las personas.