En la semana estará operativa la retención del impuesto, que pagarán los apostadores cuando cobren su premio y luego, a partir del 10 del mes próximo, el Iafas realizará el depósito correspondiente.
El titular de la Administradora Tributaria de Entre Ríos (ATER), Marcelo Casaretto, informó que el Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (Iafas) comenzará a cobrar a partir del 1º de noviembre el impuesto para los juegos de azar. El mismo será pagado por el apostador cuando cobre su premio y «la retención será de entre un tres y cuatro por ciento», detalló el funcionario. «En diciembre se planteó una reforma tributaria y estaba consignado esto, donde rápidamente reglamentamos esa ley y dispusimos que el Iafas fuera el agente de retención, pero durante varios meses eso no se estuvo haciendo», dijo. «Nosotros tuvimos varias reuniones y lo planteamos, pero recién la semana pasada me informaron que a partir de noviembre esta retención se hará afectiva en el cobro de impuestos», agregó. «Esta semana estará operativa la retención del impuesto, que pagarán los apostadores cuando cobren su premio y luego, a partir del 10 del mes próximo, el Iafas realizará el depósito correspondiente», detalló Casaretto en declaraciones. Por otra parte, el funcionario fue consultado por el pedido de los comerciantes, quienes exigieron la excepción del pago de ingresos brutos. «Esto que se plantea es inviable.
Siempre se discute la cuota que se va a pagar, si es un punto más o uno menos». Y agregó: «Pero hay que tener en claro que la industria es una actividad muy particular, porque compite con otras empresas que vienen a la provincia o si pretenden importar, por eso, el impuesto puede ser un costo que saque de competencia a un sector. Aunque también puede ser un estímulo para que las industrias se radiquen acá, pero el comercio no tiene un problema de competitividad, lo que pasa es que cada sector quiere hacer un lobby particular para pagar menos impuestos». En cuanto al reclamo de los gremios, quienes se quejan de que lo recaudado con el impuestazo no se volcó en los salarios, Casaretto aseguró en declaraciones al programa «A quien corresponda» (Radio De la Plaza) que reprodujo Análisis Digital: «Cada peso adicional que ingresó se ha volcado en una mejora salarial de los trabajadores y eso lo saben los 700 empleados de ATER y todos los sindicatos». En ese sentido, añadió: «Es mentira que no se distribuyó, sí se hizo, porque ese fue el compromiso que realizó el gobernador Sergio Urribarri cuando se hizo la reforma impositiva. Algunos dicen que mucha gente pagó un aumento en el impuesto de su casa y auto, pero quizás fue de 200 o 300 pesos bimestrales, pero los incrementos salariales fueron de entre 2.000 y 4.000 pesos más por mes, dependiendo del escalafón».