El equipo Granate alcanzó un trabajoso pero justo triunfo en condición de visitante. Fue 2-1, con un descuento local plagado de polémica por un penal que no fue. Igualmente, Guillermo sonríe. 
Lanús se puso a un punto de la cima del Torneo de Primera División porque batió a Defensa y Justicia 2-1, en el Estadio Norberto Tito Tomaghello, sustentado en su practicidad.
Por la duodécima fecha, los goles del equipo de los mellizos Guillermo y Gustavo Barros Schelotto los aportaron Nicolás Pasquini y Jorge Valdéz Chamorro, pero sobre el final del primer período descontó el uruguayo Washington Camacho, de penal, y dejó abierto el suspenso durante 45 minutos.
Claro que en la cúspide River tendrá mañana la ocasión de estirar su ventaja, ya que por este capítulo recibirá a Belgrano, un adversario que suele ser exigente.
En cuanto al generoso conjunto que dirige Darío Franco, tuvo más la pelota, pero no terminó favorablemente sus intentos, como para dar una señal de su decimoséptimo puesto en la jeraquización.
Temprano, Lanús tuvo dos oportunidades y las convirtió, la primera de ellas de tiro libre, por lo que prevaleció ante todo por su eficacia.
El gol de tiro libre llegó por intermedio de Pasquini, quien de zurda colocó la pelota a la izquierda de Diego Pellegrino, quien esperaba el derechazo del especialista paraguayo Víctor Ayala.
Apenas tres minutos después, Oscar Benitez avanzó y dio el pase atrás para la aparición de Valdéz Chamorro, quien definió con la cara interna del pie derecho.
Fue una ráfaga de eficacia de Lanús, pero Defensa fue el que tuvo un mayor porcentual de posesión de pelota, pero el problema consistió en que no supo como entrarle a su adfersario y chocó con la retaguardia granate.
El anfitrión cuando tuvo la posibilidad de jugar por las bandas careció de una referencia de área para prevalecer en las acciones aéreas.
A los 41 pudo haber aumentado Lanús, que siempre fue muy rápido por los costados. A modo de ejemplo, Lautaro Acosta fue el que generó la falta en la escena previa al tiro libre.
A los 18 Junior Benítez incursionó por derecha, hizo la diagonal y picó la pelota con la intención de convertir, pero o Pellegrino salvó la situación con un manotazo de lo más oportuno.
Sin embargo, cuando se acababa el primer segmento, uno de los intentos de Defensa encontró mal parado a Facundo Monteseirín, la pelota dio en uno de sus brazos y el árbitro Diego Abal interpretó que debía cobrar penal.
Camacho se hizo cargo de la ejecución, tiró hacia el centro del arco, Agustín Marchesín fue a su derecha y Defensa encontró así un premio a la persistencia.
El segundo período fue más equilibrado, porque el local buscó el empate con insistencia, pero se topó con un oponente que se fortaleció en el medio con el ingreso del experimentado y rendidor Leandro Somoza.
Otro que entró en Lanús para aportar años de fútbol fue el goleador uruguayo Santiago Silva. En definitiva, Defensa careció de contundencia, al tiempo que Lanús se mantuvo firme en el fondo y estuvo atento a la chance de rematar la obra con una réplica.
Justamente, lo único que le faltó al cuadro de los Mellizos fue un tercer gol, pero lo que obtuvo en Florencio Varela igual tomó la forma de un triunfo valioso y merecido.