La Sala Nº 1 de la Cámara de Casación Penal de Paraná resolvió no hacer lugar al recurso de casación contra la sentencia de la Cámara del Crimen, que declaró a Jaime Gustavo Maillo autor material y responsable de los delitos de «Homicidio calificado por el vínculo, Amenazas simples y Hurto calificado, condenándolo a la pena de Prisión perpetua», por lo que confirmó la sentencia a prisión perpetua.
Cabe recordar que en la madrugada del 2 de febrero de 2012 Maillo llegó a su casa, discutió con su esposa, Viviana Di Bacco, y la asesinó a puñaladas, delante del hijo de 8 años. El femicidio conmocionó a Diamante y generó serias críticas a la Justicia, porque la víctima había denunciado antes las amenazas que había sufrido por parte de su esposo, pero no fue escuchada. El 13 de mayo, Maillo fue sentenciado a la pena de prisión perpetua, por el delito de Homicidio calificado por el vínculo.
Sus defensores plantearon sus críticas al fallo ante la Cámara de Casación Penal, al sostener que el agravante no valía, ya que el matrimonio hacía años que había dejado de existir, aunque no se haya hecho el trámite de divorcio. Tanto la Fiscalía como la querella particular se opusieron a tal planteo, y los jueces rechazaron el recurso de casación. De esta manera, Rubén Chaia, Daniel Malatesta y Alejandro Grippo confirmaron la sentencia a la máxima pena, que Maillo ya cumple en la cárcel de Paraná. «El hecho de estar casado no significa que deba aplicarse automáticamente un artículo, sino que deben valorarse las circunstancias del caso, ya que de lo contrario se viola el Derecho de Defensa y el Derecho a ser oído, establecido en el Pacto de San José de Costa Rica», sostuvieron los defensores Miguel Cullen y Sebastián Reyes. Por el contrario, los integrantes de la Cámara de Casación Penal afirmaron que «El vínculo matrimonial solo se extingue por muerte o sentencia de divorcio».
Al citar jurisprudencia sostuvieron: «Antes de que ello ocurra, debe aplicarse la agravante», y descartaron de este modo que la separación o no convivencia no alcanzaba como argumento para evitar la perpetua. Como se informó mientras transcurría el juicio en mayo, se supo que el hijo menor de la pareja observó los momentos previos y la discusión que mantuvieron en la casa. Maillo, luego de terminar con la vida de Di Bacco por varias heridas de arma blanca, le robó el celular a la mujer y se fugó a Santiago del Estero, donde lo capturaron una semana después. Cinco hijos quedaron sin su madre, pidiendo que encierren y condenen a su padre. «Fue un hecho evitable. A una persona que hizo una denuncia en ningún momento se le asignó custodia policial. Todos tienen una cuota de responsabilidad, pero lamentablemente se echan la culpa», dijo a Uno el día de la sentencia el querellante Nelson Schlotahuer.