El técnico del Marsella explicó que debió suspender el entrenamiento porque Amalfitano, en conflicto con la dirigencia, interrumpió la práctica. Mirá lo que dijo. 
Tan excéntrico como genial, Marcelo Bielsa revolucionó al universo del Olympique de Marsella. A poco de afrontar su segundo partido de la Liga, el extécnico de la Selección quedó en el medio del fuego cruzado entre la dirigencia y el jugador Morgan Amalfitano.
Con nuevo traductor, el Loco se encargó de explicar el lío que se produjo ya que el volante de 29 años no es del agrado de los dirigentes y decidió que se tomara el jueves libre porque no estaría entre los convocados para el domingo. Sin embargo, Amalfitano asistió igual y le dieron un trabajo separado del plantel. El conflictivo jugador no acató la orden e interrumpió el trabajo de los titulares; ante semejante actitud, Bielsa suspendió el entrenamiento.
“En el caso de Amalfitano, no tomé ninguna medida disciplinaria contra él. Lo citamos a entrenarse normalmente. Pero su comportamiento no tiene explicación lógica. Él sabe desde el primer día que no iba a pertenecer esta temporada al plantel principal del Olympique de Marsella por una decisión de la directiva, que me dio motivos lógicos..”, explicó el Loco.
Y agregó que le había ofrecido el día libre, “pero decidió venir igual. Dijo que quería entrenar y que tenía derecho a hacerlo. Decidimos qué trabajo iba a hacer y, cuando llegó el momento de ejecutarlo, dijo que él no quería hacer ese trabajo, que quería hacer el trabajo del equipo. Me pareció una exageración, se lo explicamos y él decidió desplazarse para interrumpir lo que estábamos haciendo. Nunca tuve rabia, ni enojo por lo que pasó. Mi decisión no fue una elección, fue la única posible”.
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