Una joven de 22 años se presentó este viernes por la tarde en la Comisaría del Menor y la Mujer de Gualeguaychú para denunciar a su concubino, un hombre de 32 años. Contó que la mantuvo cautiva desde el lunes, la golpeó con un caño en todo su cuerpo, le produjo cortes y la amenazaba con un arma, introduciéndole el caño en la boca y en su vagina.
La víctima se presentó en la Comisaría en un claro estado de nerviosismo y miedo, acompañada de su hijo de dos años, que fue testigo de la violencia de género que sufrió su madre durante cinco días. Todo el hecho se desarrolló en una casa del barrio La Cantera, en calles Asisclo Méndez y Buenos Aires, domicilio donde convivía la pareja.
Al parecer, la mujer habría intentado ayudarlo en un problema de adicciones, lo cual no tuvo una buena recepción y esto desencadenó la violencia. Aprovechando que disponía de varios días no laborables, mantuvo a la joven prisionera en su propia habitación. Desde el lunes, y según consta en la denuncia, la mujer fue víctima de todo tipo de maltratos psicológicos y físicos, como golpes con un garrote de hierro y cortes en piernas, brazos y espalda con una cuchilla. La violencia se profundizó aún más cuando el hombre la amenazó con un arma de fuego y luego se la introdujo en la boca y en la vagina. Al parecer, los hechos de violencia habrían sido reiterados, pero lo que la víctima sufrió en los últimos cinco días no habría tenido precedentes.