Christian Bragarnik es casi un desconocido, pero maneja técnicos y coloca jugadores. 
Cuando viene a Buenos Aires, José Mansur no duerme en un lugar cualquiera. El presidente de Godoy Cruz tiene las llaves que le presta el nuevo cerrajero del fútbol argentino, ése que es capaz de destrabar el pase imposible. El departamento ubicado al lado de la oficina de Score Fútbol es el espacio que elige Mansur para sus estadías porteñas y está a nombre del dueño de la empresa que gobierna el mercado argentino: Christian Bragarnik.
Godoy Cruz tiene cinco futbolistas de ese representante. Jorge Almirón, el ex técnico del equipo mendocino, también es patrocinado por Bragarnik. Cuando Independiente lo contrató, Mansur pataleó contra el club de Avellaneda, pero no contra quien había hecho las gestiones para mudarlo. “Es un buen muchacho, hizo todo lo posible para que siguiera con nosotros”, lo defendió. Un reconocimiento posible podría ser que no dejó sin DT a Godoy Cruz: Marcelo Valeri, uno de sus socios, le consiguió un entrenador. La víctima fue Atlanta, que a dos semanas de empezar el torneo perdió a Carlos Mayor. El equipo de la Primera B no tiene jugadores representados por Bragarnik.
Muy diferente es el caso de Defensa y Justicia, que cuenta con siete futbolistas de Score Fútbol. Bragarnik es una especie de gerenciador del Halcón. Con ironía, un dirigente del Ascenso le dice a PERFIL: “El halcón no es un buitre”.
Colón también fue un depósito de futbolistas del nuevo Gustavo Mascardi. En la época del ya destituido Germán Lerche contó con diez de sus futbolistas. El técnico era Antonio Mohamed, también representado por Bragarnik. En el edificio de Puerto Madero donde está Score Fútbol hay, además, un departamento a nombre del ahora DT de América de México. Si alguna vez coincidieran en Buenos Aires, Bragarnik, Mohamed y Mansur podrían ser vecinos. Y todo como en casa.
La pista Ayoví. Bragarnik no sólo domina el mapa de los 220 representantes argentinos registrados en FIFA. Sus brazos llegan hasta México. La lupa hay que ubicarla sobre Tijuana, donde juegan los Xolos. Según una investigación de la revista Un Caño, “el vínculo viene por su amistad con Jorge Alberto Hank Inzunza, uno de los 19 hijos de Jorge Hank Rhon, dueño de Xolos. Bragarnik llevó varios DT y jugadores al club. Hank Rhon es un oscuro líder político de Baja California, que maneja una cadena de casinos sospechada de lavar el dinero del cartel de Tijuana”. En esa ciudad mexicana, a 9.700 kilómetros de Florencio Varela, hizo la pretemporada Defensa y Justicia. Sus jugadores, además, tuvieron otro premio: tras fortalecer los músculos, pasearon por los casinos de Las Vegas.
Xolos se fundó en 2007 y el año pasado llegó a jugar cuartos de final de la Libertadores con Mohamed. El Turco aterrizó vía Bragarnik, que le dijo a su representado que había que ayudar a unos amigos.
Este abogado desembarcó en Defensa y Justicia en 2009, por entonces en la B Nacional. Hoy representa a Darío Franco, el DT, y a siete de sus futbolistas. Pero nadie se queja. Al contrario, veneran al mesías que llevó al club de Florencio Varela a jugar por primera vez en la A.
José Lemme, que además de presidente de Defensa y Justicia es el tesorero de la AFA, le dijo a El Gráfico sobre los aportes recibidos: “Es gente amiga que me trae jugadores, pero que no gana dinero con el club. Ellos confían en nosotros y nosotros en algunas cosas en ellos”.
PERFIL intentó hablar durante dos días con Bragarnik. Nunca devolvió la llamada.
Tampoco aclaró en ningún medio un triángulo que involucra a tres equipos cuyos entrenadores son representados por él: Independiente, Godoy Cruz y Defensa y Justicia. Bragarnik anotó el jueves por la noche al ecuatoriano Jaime Ayoví. Consultado ayer, Almirón se sorprendió: “No sabía nada. Es un jugador de selección, lo conozco, pero no fue una decisión mía”. Ayoví juega en un equipo cualquiera que, resulta, no es cualquier equipo: ya no seguiría en Xolos de Tijuana.
Gargantas profundas. Leonel Di Plácido apenas jugó once partidos en All Boys. Sin embargo, el defensor llamó la atención de Racing. El club de Avellaneda será dirigido esta temporada por Diego Cocca, quien condujo al ascenso a Defensa.
Di Plácido tiene 20 años y buenas condiciones. Su problema era burocrático: el representante es Fernando Hidalgo. El chico habló en el programa de Mariano Closs: “Me insinuaron que cambie de representante. Alguien me dijo que para ir a Racing yo tenía que irme con él. Conozco a la persona que me llamó. Creo que es el representante también del técnico de All Boys”. El DT era Ricardo Rodríguez, otro de los entrenadores de Bragarnik.
Una denuncia similar hizo Ismael Quilez hace cuatro años, cuando jugaba para Colón. El técnico del Sabalero era Mohamed y el defensor pasó de titular al abismo. A Quilez le recomendaron cambiar de representante. “Incluso llamaron a mi viejo, pero no quise”, disparó en Radio Nacional de Santa Fe. Por entonces, Bragarnik empezaba a construir su imperio.
(*) Esta nota fue publicada en la edición impresa del Diario PERFIL.