Luego del trágico episodio del domingo cuando su hijo habría asesinado a su ex pareja Johana Carranza, las dos hijas en común, y Carlos Peralta, los padres hablaron del momento que atraviesan.
Angélica y Enrique Ledesma, los padres de Juan Pablo Ledesma, el presunto homicida de Johana Carranza, sus hijas Luciana de 5 años, y Candela de 7, y Carlos Peralta, dialogaron con Riel FM de la vecina localidad de Basavilabaso sobre lo ocurrido el domingo a la noche en el barrio 134 viviendas de Concepción del Uruguay.
Muertos en vida
Quebrados, «muertos en vida” dijo Enrique Ledesma sobre la realidad que atraviesan y contaron que su hijo estuvo desde el viernes con sus hijas en Basavilbaso, y que a media tarde habían salido de la casa familiar en el barrio 30 viviendas con el propósito de tomar un helado. «Nunca regresaron», contó Enrique que admite que pensó que algo había ocurrido y que alertó a la Policía local, la que se comunicó con el Comando Radioeléctrico de La Histórica. El hombre dijo que les hizo saber de que su hijo tenía una orden de restricción de acercamiento a Johana y su vivienda, que era en el marco de una situación generada por violencia de género.
Evitar la tragedia
Ledesma dijo que habló telefónicamente con Johana y que la comunicación se cortó abruptamente. Que pudo hablar minutos después pero que aún así junto a otro integrante de la familia decidieron viajar inmediatamente a nuestra ciudad porque algo sospechaban. Fueron a la Comisaría Primera pretendiendo que la policía interceptara a su hijo antes pero no lo consiguieron.
El horror
Ante la negativa policial en un remis llegaron al barrio 134 viviendas donde al recorrer por fuera la vivienda, observaron por una ventana que en el interior había al menos dos cuerpos tendidos en el suelo. «Intentamos abrir la puerta. Había un charco de sangre, no podíamos entrar, creo porque el cuerpo de mi hijo tirado en el suelo no lo permitía. Por ello es que regresamos a la Comisaría Primera y avisamos lo que vimos y de inmediato salió una patrulla», relató Enrique.
Angélica, la madre del presunto asesino precisó que supieron que las niñas estaban muertas por la información de un pastor evangélico de la iglesia a la que concurría su hijo. Y que Juan Pablo permaneció agonizando en el suelo al menos hasta las 5 de la mañana, y que desconocen cuál es el estado actual de salud. Entre llantos pidieron el perdón de los vecinos por los errores que como padres pudieron cometer en la crianza, asegurando jamás suponer el atravesar una situación como la vivida.