ALEMANIA LA PASABA MAL CON GHANA, PERO EN UN MINUTO EL GOLEADOR LO EMPATO Y ALCANZO A RONALDO COMO MAXIMO ANOTADOR EN MUNDIALES
Justo en el momento en que el partido invitaba a pensar que Ghana era otro de los comegrandes del Mundial, apareció en escena ese fenómeno llamado Miroslav Klose para darle el empate a Alemania en el peor momentto de un partido en el que nunca se sintió cómodo, que lo sufrió más que lo disfrutó y que terminó arañando un empate que debería contentarlo. De paso, certificó una vez más esa frase que de tan repetida se volvió lugar común, aunque no exenta de realismo, que pondera lo invencible que parecen los germanos.
Un minuto tardó Klose en acomodar los tantos cuando desvió un cabezazo en el corazón del área de Ghana para empardar el marcador y devolverle el alma al cuerpo en un lapso en el que los africanos tenían grogui al gran candidato. De paso, el goleador se dio un pequeño gustito: superó al mítico Gerd Müller como máximo anotador de la selección alemana y alcanzó al brasileño Ronaldo como máximo anotador de los mundiales, con 15.
Hasta ese momento del encuentro, Alemania se había parecido poco a la Alemania que trituró a Portugal el lunes pasado con un juego audaz, solvente y contundente, capaz de cambiar por gol cada llegada. Ayer, los de Joachim Low parecieron sufrir los efectos del calor y la humedad de Fortaleza y eligieron dosificar esfuerzos ante un rival que, obligado por la necesidad, tenía que dar un plus y que si bien nunca lo dominó, le marcó muy bien los límites.
Así, después de un primer tiempo apenas discreto, el complemento trajo mejor juego, y con él, emociones y goles. Primero fue Gotze de cabeza, tras un centro de Thomas Müller, después la corajeada de los valientes muchachos de Ghana que, lejos de abatirse, en una ráfaga incontenible de velocidad en ataque y voluntad, lo dieron vuelta por intermedio de Ayew y Gyant, que definió bárbaro ante la salida de Neuer. Empujados por el aliento de los brasileños, los africanos tuvieron al borde del nocaut a su rival y en el intento perdieron orden y concentración.
El resto lo hizo la determinación del DT alemán para mandar a la cancha a Klose y Schweinsteiger. Y la voracidad del goleador para acomodar la historia a favor del poderoso, que quedó con un pie y medio en octavos ya que, más allá de los puntos, hace valer su buena diferencia de gol (+4).
A Ghana sólo le queda ganar. Valga la redundancia…