El escribano Cristóbal Carlos Vairetti falleció a los 91 años. Fue un histórico dirigente del justicialismo. Según se informó ayer no habrá velatorio y sus restos serán inhumados este viernes en el Cementerio Municipal. Hace pocos días, el pasado 20 de agosto, había cumplido los 91 años.
Vairetti era escribano, fue presidente del Partido Justicialista durante muchos años en la provincia, funcionario en distintos cargos, diputado nacional y tres veces candidato a gobernador. Pasó sus últimos años redactando sus memorias, escribiendo libros y dando enseñanzas de lo bueno que es la política en el buen sentido de la palabra.
Era padre de dos hijos, tenía nietos y bisnietos.
En una de las tantas entrevistas, Vairetti había afirmado que «no me gustan la corrupción, los vedetismos, las obsecuencias y las terquedades». También expresaba que «lo peor que les puede pasar es ser travestis de la política, que un día están aquí, mañana allá. Hay que ser coherentes, que te maten a votos, pero no perder la dignidad». En marzo de 2016, encabezó la lista de Congresales del PJ secundado por Adán Bahl, José Cáceres, Julio Solanas, José Halle y Blanca Osuna, entre otros.
Hace casi cinco años, el 13 de septiembre del año 2011, el Partido Justicialista le rindió homenaje por su trayectoria militante. En el emotivo acto, le entregaron una placa recordatoria con la inscripción de unas de las 20 verdades peronistas: «La política no es para nosotros un fin, sino solo el medio para el bien de la Patria, que es la felicidad de sus hijos y la grandeza nacional».