En la madrugada de ayer efectivos del Comando Radioeléctrico, fueron alertados por un llamado anónimo que daba cuenta de que en calles Teniente 1° Ibáñez y Larroque, se encontraba un hombre en aparente estado de ebriedad y profiriendo gritos, perturbando la tranquilidad del vecindario.
Una patrulla llegó al lugar y observó a un sujeto que no podía mantenerse en pie, gritaba e insultaba al personal policial ante su arribo. El hombre tenía en su mano una botella de plástico con un líquido de color azul, en apariencia combustible.
Por la premura del caso se le solicitó cordialmente que no gritara, que se tranquilizara, que deponga su actitud; haciendo caso omiso. El sujeto continuaba con sus gritos; tanto es así que en un momento dado, al no poder mantenerse en pie, se cayó al piso y al incorporarse rápidamente comenzó a tirar golpes de puños y patadas hacia los presentes sin llegar a producir lesión alguna. Al no poder tranquilizarlo, se lo trasladó a dependencias policiales, iniciándose expediente contravencional por ebriedad y desorden. Se trataba de un joven de 28 años de edad, el cual quedó alojado en dependencias de Comisaria Primera.