San Cirilo, monje, y San Metodio, obispo. Eran hermanos y habían nacido en Tesalónica. Cirilo, famoso por su saber -fue llamado «el filósofo»- se ordenó de sacerdote y se hizo monje. Metodio fue gobernador de una región del imperio de Bizancio y más tarde también sacerdote y monje.En el año 863, fueron enviados por el emperador Miguel II como misioneros a las regiones eslavas, y predicaron eficazmente, gracias a sus conocimientos de la lengua, en Moravia, las regiones del Dnieper y del Volga, y en Croacia. Tradujeron la liturgia latina y la Biblia a las lenguas eslavas, para lo cual inventaron el alfabeto «cirílico» del que derivan los caracteres actuales del ruso, del serbio y del búlgaro.
La lengua sudeslava de Cirilo y Metodio es todavía el idioma litúrgico de los rusos, ucranios, serbios y búlgaros, tanto católicos como ortodoxos. San Cirilo murió en Roma el 14 de febrero del año 869, y San Metodio en Velherad, Moravia, el 6 de abril de 884. Ambos son considerados los apóstoles de los pueblos eslavos. San Valentín, mártir. Era un cristiano romano que con su simpatía ganaba a muchos para la fe. El mismo emperador Claudio era atraído por él. Pero el gobernador Calpurnio amotinó al pueblo contra Valentín. Claudio intentó salvarlo pero no pudo impedir que fuera decapitado el año 269 en la vía Flaminia junto al puente Milvio sobre el Tíber.